Esta imagen, de gran devoción popular en toda la provincia de Pontevedra y aun fuera de ella, esta tallada en piedra (posteriormente policromada) y se cree que procede de la época románico-gótica o bien de fecha anterior al siglo IX…
Cañiza – (Pontevedra) Galicia
No hace muchos años hubo de ser restaurada y policromada, pero no existe documentación concreta de la fecha de su realización original. Su devoción está muy arraigada en la zona sur de Galicia y su fiesta se celebra anualmente en el día 8 de Septiembre, día en que la Liturgia de la Iglesia celebra la festividad de la Natividad de la Stma.Virgen María.
En ese día, después de la Misa solemne en el Santuario, tiene lugar una tradicional procesión en la que sus devotos suben la imagen de la Virgen a un carro típico del país, adecuadamente engalanado y arrastrado por una pareja de bueyes, como conmemoración de aquel lejano día en que hubo de dirimirse el lugar donde asentar y dar culto a esta imagen. Concluída la Misa y la procesión comienza una gran romería popular, que siempre cuenta con numerosísima concurrencia.
Según cuenta la tradición, lo sucedido fue que cuando milagrosamente apareció la imagen en una cueva (de una zona llamada" O Coto da vella") los párrocos de las dos feligresías cercanas a dicho lugar pretendían, como era lógico, llevar la imagen para su respectiva parroquia y después de grandes discusiones sobre el tema, llegaron a un especie de solución "salomónica", determinando que se subiera la imagen a un carro de bueyes (cuyos animales llevarían la cabeza tapada para que no pudieran ver absolutamente nada); dejaron, pues, a los bueyes con plena libertad para dirigirse hacia una u otra feligresía (sin manejo alguno de personas) y el instinto o decisión de los propios animales sería respetado hasta que se pararan por su propia voluntad… Allí el lugar donde había de quedar la imagen de la Virgen, para rendirle culto y devoción.
Efectivamente, los bueyes iniciaron su camino y finalmente se detuvieron en un lugar donde había una fuente, que pertenecía a la feligresía de LA FRANQUEIRA. Con ello quedó resuelto el litigio y la imagen quedó en el lugar donde hoy está el Santuario que lleva su nombre.
Al parecer hay constancia de que en los primeros años, siguientes a su aparición la tal imagen se conoció como la Virgen de la Fuente y en época muy posterior a la de la primera Ermita de la Virgen, surgió el Monasterio (hoy Santuario) que estuvo a cargo de los monjes Benedictinos y hoy es la Iglesia parroquial de NUESTRA SEÑORA DE LA FRANQUEIRA.
Mi querida madrina Dolores Bisoso y su esposo Florentino Trapaga, eran oriundos de esa bella Tierra y me contaban muchas cosas. Ya fallecieron y sus restos se quedaron aquí en México.