Que se vuelva vicio

Columna olimpica

31.7.12

     Hace algunos años, platicando con formadores de jugadores en Montevideo, Uruguay, en el marco de la Copa América, me llamó la atención que uno de ellos decía que en países como el nuestro, el principio de educación deportiva estaba totalmente equivocado.

“Los mentores de los niños los enseñan a jugar, no a competir y cuando, según sus cuentas ya están listos para hacerlo, los rivales que van a enfrentar a nivel internacional, les llevan demasiada ventaja”, decía el profesor.

Y abundaba: “El ganar se tiene que volver un instinto, como contestar el teléfono, igual que manejar el auto, una cuestión que no te preguntas, ante la cual no hay duda, simplemente hacer lo que sabes”.

Para ello, comentaba, es fundamental que los “pibes”, cualquiera que sea su especialidad, -ya que el comentario no era exclusivo al futbol-, aprendan los rudimentos de la técnica. Puede haber excepciones, donde alguien destaque con base en sus facultades, pero normalmente el atleta triunfador, va puliendo esos dones que Dios y la naturaleza le dieron depurando la ejecución.

Hoy, por segundo día consecutivo, deportistas mexicanos, en este caso mujeres, logran un importante triunfo y es otra vez la fosa de clavados, el testigo presencial de esta proeza.

 Paola Espinoza, veterana clavadista y ganadora de bronce hace cuatro años en Beijing, hizo dupla con una niña de 15 años, Alejandra Orozco, para ceñirse al pecho la medalla de plata.

La estrategia fue parte fundamental de la victoria, ya que la pareja azteca arrancó con clavados de poco grado de dificultad, ubicándose en la séptima posición. A partir de la tercera ronda, elevaron considerablemente lo difícil de la tirada, logrando colarse hasta ese segundo lugar que ya no soltarían.

La pregunta sería: ¿Son extraterrestres los clavadistas mexicanos? Por supuesto que no. Simplemente trabajan bajo una planeación a largo y mediano plazo, sin grillas ni intereses mezquinos y saben hacer equipo.

Paola, quién además festejo su cumpleaños 26 con este logro, ha sido generosa y paciente con su pareja.

Alejandra por su parte, pese a su corta edad, se manejó con madurez y humildad para dejarse guiar y eso, créame usted, tiene mucho valor.

Ojalá otras Federaciones y disciplinas deportivas emularan el trabajo que se hace en clavados. En un medio social como el mexicano, donde se busca más la descalificación que la imitación, bueno sería preguntar qué demonios hacen de bueno en este deporte para incorporarlo a la vida diaria.

Que ganar se vuelva un vicio, no una sorpresa de cada cuatro años. Que la planeación estratégica invada a todas las disciplinas. Que los entrenadores sean realmente valorados. Que México brille en el medallero de la vida. ¡Gracias Pao y Ale!


TRIVIA: ¿Cuántas medallas ha ganado México en la historia de los Juegos olímpicos?

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba

Copyright © 2024 Encuentra by Juan Diego Network. Todos los derechos reservados.