San Francisco Javier un navarro universal, un ejemplo de tesón y de generosidad.En el siglo XVI, tras los grandes descubrimientos geográficos, se trazan las primeras rutas interoceánicas que se adentran en territorios nunca visitados por los europeos. En ese tiempo, Francisco de Javier, hombre de familia noble, nacido en el Reino de Navarra y profesor universitario en París, emprende un periplo que le lleva a recorrer a lo largo de once años costas y ciudades, caminos y aldeas de África y de India, de Ceilán y Malaca, de Singapur y Molucas, de Japón y de los confines de China. Propagando la fe cristiana, ayuda a los necesitados y a los enfermos, muestra los conocimientos de la civilización europea y transcribe en sus cartas las costumbres y creencias que observa en aquellos pueblos y países desconocidos hasta entonces y conjuga los valores de Oriente y Occidente. En todos los lugares que recorre, y en otros muchos de todas las partes del mundo, permanece hoy, cinco siglos después, una impronta de su vida y de su obra.Y en su tierra natal, Navarra, Francisco de Javier es un personaje querido y admirado por todos, un navarro universal, un ejemplo de tesón y de generosidad.