San Nicolás de Tolentino (1245-1305)
Nacido en Fermo, Italia, recibió este nombre por la devoción que tenían sus padres a san Nicolás de Bari. Perteneció a la orden de san Agustín y residió la mayor parte de su vida en un convento de Tolentino, no lejos de su ciudad natal.
Este santo fue popular por los grandes milagros y prodigios que se obraron durante su vida. Fue también conocido como abogado de las almas del Purgatorio, por una visión terrible que tuvo donde le pedían sufragios. Sin embargo, algo muy importante, aunque no tan llamativo de su vida, es que fue un confesor muy misericordioso, que se reservaba la severidad y los malos tratos para sí mismo, disciplinándose y ayunando casi constantemente, y a los penitentes los trataba con gran benevolencia.
Beato Francisco Garate (1857-1929)
Religioso jesuita del cual dijo Juan Pablo II en la ceremonia de su beatificación el 6 de octubre de 1985: “El mensaje de santidad que nos ha legado es sencillo y límpido, como sencilla fue su vida de religioso inmolado en la portería de un centro universitario de Deusto”.