San Luis Gonzaga, religioso (1568-1591)
Nació el año 1568 cerca de Mantua, en Lombardía, hijo de los príncipes de Castiglione. Su madre lo educó cristianamente y no tardó Luis en mostrar inclinaciones poco comunes para la virtud. Tendría doce años, cuando dicen los autores que a esa edad ya había llegado a la cumbre de la contemplación.
Pasaba largas horas ensimismado en la oración y trato divino. Huía siempre que podía de todos los pasatiempos mundanos y de todos los festejos que era natural que abundaran en su ambiente y en su misma casa. Cuenta un criado que cuando le llamaban con su título de príncipe y señor, les decía con gran amabilidad: «Servir a Dios es mucho mas glorioso que poseer todos los principados de la tierra». Era el heredero del Principado de Mantua y Príncipe del Sacro Imperio. Con su virtud extraordinaria había dejado atónitas a las cortes de Madrid, Florencia, Pavía, Mantua… y a pesar de ello no se sentía atraído por tantas vanidades, y solía repetir: ¿»Qué es todo esto para la eternidad? Señor, ayúdame a no olvidar nunca el fin para el cual me has creado».
En todas partes dio muestras de madurez de juicio superiores a sus años, así como de una elevada santidad. Imitaba los ejemplos de los santos conforme se describía en los escritos de entonces. Lo admirable en Luis era la extraordinaria tenacidad y fuerza de voluntad con que siguió las indicaciones de la voluntad de Dios. Tuvo el don de la oración, siendo Dios su principal y aún su único Maestro. En 1583 ingresa en la Compañía de Jesús. Era de ingenio pronto y perspicaz y sobresalió en sus estudios de Filosofía y Teología. Murió a la edad de 23 años en 1591 antes de llegar al sacerdocio y fue beatificado por el Papa Gregorio XV, en 1727 fue canonizado y en 1926, el Papa Pío XI lo nombró Patrono de la Juventud cristiana.
San José Isabel Flores (1866-1927)
Originario de Teúl, Zacatecas, México, José Isabel inició sus estudios en el seminario de Guadalajara en el que pronto destacó por su dedicación a los estudios. Al ordenarse fue adscrito a la parroquia de Teocatliche y luego a Zapotlanejo en el estado de Jalisco, donde permaneció por espacio de veintisiete años, hasta que empezó la persecución religiosa en el país.
Sus feligreses admiraban en él su pobreza ejemplar, su vida de pureza y castidad, su obediencia a los superiores, así como su exquisito sentido de la caridad de modo que jamás oyeron de él una crítica o murmuración.
Su acción pastoral se caracterizó por su entrega a todos, sin distinciones de clases. Si algunos tenían lugar preferente en su corazón eran los enfermos, y por dedicarles a ellos más atención que a su propia salud, contrajo una penosa infección que le resultó en la amputación de una parte del maxilar.
Cuando se disponía secretamente a celebrar misa en un rancho, el padre José Isabel es delatado y conducido a la casa sacerdotal, que había sido convertida en cuartel, donde lo tuvieron tres días colgado de las axilas sin darle nada de comer ni de beber.
En el panteón del pueblo, fue primero martirizado con una soga al cuello para subirlo y bajarlo hasta que el comandante mismo lo degolló.
Fue beatificado por Juan Pablo II del 22 de noviembre de 1992 y canonizado el 21 de mayo del año 2000.
San Anton María Schwartz, San Jacobo Kern (+1924) y Santa Restituta Kafka (+1929)
San Anton María Schwartz presbítero y fundador de una Congregación a favor de los jóvenes trabajadores. San Jacobo Kern hermano premonstratense, luchador contra le herejía de Hus y Santa Restituta Kafka religiosa mártir de la Tercera Orden de San Francisco, asesinada por los nazis, fueron beatificados el mismo 21 de Junio de 1998 en la catedral de Viena, por Juan Pablo II.
* Señor: «ya que no pudimos imitar a San Luis en la inocencia, que por lo menos lo logremos imitar en la penitencia. Amén».