Danos un corazón atento

Una hermosa señora que tiene grandes habilidades para restaurar imágenes, libros y esculturas observó el deterioro de un Sagrado Corazón de Jesús en un rincón de una pequeña capilla, pidió autorización a la religiosa encargada del templo para llevarlo a su casa y restaurarlo, la hermana accedió inmediatamente. La restauración de una mano y algunos otros detalles en el manto fue relativamente rápida, sin embargo, para retocar las manos y el rostro, la mujer pidió ayuda a alguien con habilidad en pintar detalles para rescatar la expresión adecuada, eso tomó más tiempo.

La religiosa en algún momento olvidó que la mujer le había pedido permiso para llevarse la imagen y creyó que alguien la había robado del templo, su angustia y frustración la llevaron a comentarlo y entonces en la comunidad se tuvo por buena la versión de que alguien había robado el Sagrado Corazón. ¡Imaginen la sorpresa al recibir la imagen restaurada y darse cuenta de que ella misma la había prestado! Por esas fechas la señora que hizo la restauración escuchó en otra parroquia la historia del robo en la capilla.

Un acto bueno fue juzgado como una acción reprobable y escandalosa por quienes no tenían toda la información, al igual que en este caso, muchas veces juzgamos con la primera y limitada información que tenemos a la mano cometiendo graves errores e incluso injusticias, en ocasiones nuestra opinión cambia radicalmente cuando tenemos más información o diferente perspectiva del mismo hecho, y sobre todo cuando podemos discernir.

Estamos a poco más de un mes de tomar decisiones muy importantes sobre el futuro del país por la cantidad de autoridades que hemos de elegir, desde el presidente de la república, pasando por senadores y diputados federales, y en muchos estados además con elecciones de gobernadores, alcaldes, regidores, síndicos y diputados locales, por otra parte, la complejidad de la decisión aumenta por el bombardeo de propaganda electoral.

Distinguir entre tanta información, y decidir en base a imágenes de publicidad exige un esfuerzo de discernimiento que para el cristiano solo puede darse a partir de la oración.

Benedicto XVI nos ilustra en su libro Jesús de Nazaret sobre la trascendencia de pedirle al Padre “venga a nosotros tu reino”, expresión que implica para el cristiano reconocer la soberanía de Dios y actuar conforme a sus enseñanzas para así dar a los demás lo que les corresponde, esto genera justicia, y nos pone en camino para construir la paz y el bien común.

El Padre Nuestro es la oración cotidiana donde pedimos a Dios que venga su reino y que se haga su voluntad, los obispos mexicanos también nos proponen una oración especial para que en este proceso electoral pidamos luz, paz, conversión y esperanza, y además para que nos ayude a discernir y a comprometernos a construir “una nación donde reine el diálogo, la verdad, la justicia y la paz.”

Salomón el rey sabio de la biblia pidió “un corazón atento para juzgar a su pueblo y para discernir entre el bien y el mal”. Si en nuestra oración pedimos a Dios lo mismo, entonces podremos tener la claridad y confianza para distinguir de entre el mar de propaganda lo que es verdadero, lo que nos permitirá construir junto con los demás un mejor país.

La oración nos transforma y ayuda a tener un corazón atento, no solo para discernir, sino para comprometernos con las necesidades y el bien de los demás; un corazón atento nos permite cuidar los matrimonios y las familias, nos mueve a estar atentos a las necesidades de los jóvenes y acompañarlos en sus decisiones; un corazón atento nos lleva a buscar la justicia y combatir la impunidad, a prevenir la corrupción y el delito empezando por nuestras acciones.


 

DrOscarFidencioFACE2

Oscar Fidencio Ibáñez Hernández
@OFIbanez

Casado, padre de 3 hijos, profesor e investigador universitario, y bloguero. Ingeniero Civil, Maestro en Ingeniería Ambiental y Doctor en política y políticas ambientales.

Mexicano, católico, autor entre otros textos de “El Espíritu Santo en tiempos de Twitter: Documentos del Concilio Vaticano II para tuiteros. Celebrando el #AñoDeLaFe”

Admirador de la Creación en todas sus dimensiones. Nací en La Misión de Nuestra Señora de Guadalupe de los Mansos del Paso del Norte (Hoy, Ciudad Juárez, Chihuahua).

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Un comentario

  1. Un corazón atento parece también cosa de sentido común, pero ahora, ya no es tan común. Se nos tiene que explicar para que ser buenos y como ser buenos.

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