Jesús debió dirigirse de nuevo a Galilea, pues allí nos lo presentan los Evangelios.
Después de estas intervenciones, Jesús debió dirigirse de nuevo a Galilea, pues allí nos lo presentan los Evangelios. Probablemente los sucesos en casa del fariseo, aconsejan el viaje. "Jesús andaba por Galilea y no quería ir a Judea porque intentaban matarlo"(Jn). Ahora no tiene residencia fija y se dedica a formar a los apóstoles de forma itinerante- Y, por tercera vez en estos años de vida pública, Jesús envía a sus discípulos –como en ocasiones anteriores, también setenta y dos- en una misión nuevamente apostólica, una vez más se repite el espectáculo: la opinión está dividida y, pese a los poderes sobrenaturales que Jesús les ha otorgado, algunos se niegan a creer Es posible que los discípulos entiendan estar ante un fracaso; de hecho, las palabras de Jesús son un canto al amor para recordar a los suyos que “todo es para bien”; que Dios sabe más y que –también en este fracaso- Dios está con ellos ¡Bien intuían los discípulos que, seguir al Señor no es fácil no cómodo. La acogida de la misión de los setenta y dos por parte del pueblo es relativamente pequeña. Así las llamadas a no perder la paz y abandonarse en las manos del Padre toman su verdadera dimensión.
Reproducido con permiso del Autor,
Enrique Cases, Tres años con Jesús, Ediciones internacionales universitarias
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muy bueno..felicitaciones