El viernes 13 de junio de 2014 quedará inscrito en la historia de los mundiales como un día negro. Por un lado, el terrible arbitraje de Wilmer Roldán en el partido de México en contra de Camerún y por el otro, la humillación sufrida por el campeón del mundo, España, en la reedición de la final de hace cuatro años ante Holanda.
En el primer tema, algo va a tener que hacer la FIFA en el tema arbitral. Una cosa son las jugadas de apreciación, la velocidad del juego y el hecho de que el jugador sea cada vez más mañoso y truquero y otra la falta de preparación e incapacidad para resolver jugadas hasta cierto punto de rutina.
Hay un gol anulado a Giovani Dos Santos, al cual se le puede dar el beneficio de la duda, sobre todo al línea colombiano Humberto Clavijo, pero en el segundo, no hay forma de invalidar la acción, ya que la bola es jugada, mediante una “peinada” de balón, por un defensor camerunés en última instancia, lo que elimina totalmente la posibilidad de un fuera de juego.
Wilmer Roldán, árbitro del partido, no supo sacar las tarjetas en forma adecuada ni mucho menos, a tiempo. Afortunadamente para él, el equipo mexicano logró sacar el resultado y las protestas en contra del trabajo arbitral, se diluyeron.
Comentario aparte merece el comportamiento de Miguel Herrera en la banca. Si no mesura su forma de protestar, seguramente será boletinado por las autoridades arbitrales y no dude usted que sea, próximamente, expulsado y suspendido. No es el tema que tenga o no razón, sino que todo el partido, como en México, se la pasa peleándose con el cuarto oficial y con el central.
En el otro tema, vaya paseo que le pegó la “naranja mecánica” a la “furia española”. Esto no tendría tintes de tragicomedia si no fuera porque le metieron 5 goles a 1 al campeón defensor de la copa del mundo y que se da después de una voltereta, ya que el cuadro de Vicente del Bosque se fue arriba en el marcador.
Viendo jugar a Chile, competidor en el mismo grupo, y a la débil Australia, no sería remoto que el monarca, al más puro estilo del rey Juan Carlos, abdique a la corona y se vaya del mundial por la puerta de atrás.
En el tema arbitral, hará su aparición el mexicano Marco Antonio Rodríguez en el partido de Grecia ante Colombia. Ojalá que tenga mucha suerte pero la realidad es que parece muy poco partido para el único juez en esta justa que tiene tres mundiales.
Viene el Inglaterra vs Italia y es el bocado a saborear. Seguimos pendientes.