Excelente actuación en un drama irregular que no atrapa al espectador
Calificación 4
Roman J. Israel, Esq.
Título original: Roman J. Israel, Esq.
Dirección: Dan Gilroy
Intérpretes: Denzel Washington, Colin Farrell, Carmen Ejogo
Año: 2017, Columbia / Bron Studios
Género: Drama
Edad apropiada: 13 +
Duración: 122 minutos.
Importante resaltar: El riesgo de “etiquetar” a las personas; hacer algo malo puede dar una sensación inicial de encanto y traer luego consecuencias graves. Asumir la responsabilidad por los errores.
Densidad de contenidos:
Lenguaje ofensivo: Media
Violencia: Baja
Sexualidad/Desnudos: Baja
Vicios y Adicciones: Baja
Clasificación MPAA*: PG-13 (Los padres son fuertemente advertidos, algún material puede ser inapropiado para menores de 13 años)
*MPAA: The Motion Picture Association of America
Resumen:
Acostumbrado a trabajos de escritorio, un abogado se ve orillado a litigar en la corte y desata una crisis.
Reseña:
Roman J. Israel (Denzel Washington) es un abogado defensor brillante e idealista con una gran capacidad para investigar en los códigos de derecho las alternativas más apropiadas para defender a los clientes del despacho, pero es un hombre excéntrico, viste descuidado y es un misántropo, por lo que tratándose de litigar y negociar en los tribunales y con el fiscal, de eso se encarga su socio y ex maestro William Henry Jackson.
Cuando este sufre un infarto, envían a Roman a pedir un aplazamiento de los casos que están en proceso. Pero el abogado comienza a negociar y eso es algo que se le dificulta debido a que no tiene habilidades sociales y es de mente cerrada. El despacho se disuelve y Roman busca trabajo en una asociación de derechos civiles, con la activista Maya (Carmen Ejogo). No consigue trabajo pero si una buena amistad. Finalmente acepta trabajar para un exitoso abogado, George Pierce (Colin Farrell), ex alumno también de Jackson, pero Roman lo desprecia porque lo considera un “comerciante” de la justicia.
¿Vale la pena?
El director y escritor del guion Dan Gilroy muestra una relación entre personalidades opuestas, uno idealista que desprecia el dinero y otro, que gusta hacer dinero más que justicia. En este punto, Roman es proclive a calificar a las personas a través de prejuicios y clichés. Sin embargo, es interesante cómo una persona con valores atrae y provoca que otros intenten imitarlo y despierta en los demás los ideales que estaban en letargo. La integridad obliga a reparar los errores cometidos. La cinta contiene abundantes diálogos jurídicos y alegatos políticos, pero a pesar de la excelente actuación de Denzel Washington no logra despegar y se siente irregular. Aún así puede servir para hacer un análisis moral y psico-social de los personajes.
Debido a diálogos técnicos, algo de maldiciones y lenguaje vulgar, así como bebidas alcohólicas y tabaco en un contexto social, está clasificada por la MPAA para mayores de 13 años.
Trailer
