La eutanasia y su "peculiar y peligrosa" aplicación el Holanda
Orientación pedagógica: La eutanasia real y aplicada deja una estela de muerte y putrefacción
Fuente: The Wall Street Journal
De los 130.000 holandeses que fallecieron en 1990, unos 11.800 murieron “ayudados” por sus médicos, según un informe del fiscal general del Tribunal Supremo de Holanda.
Algunas de estas muertes son los típicos casos que citan los defensores del “derecho a morir dignamente”: un enfermo terminal y agonizante que solicita que se acorten sus días. Pero muchos no lo son. Según consta en el citado informe de la fiscalia del Tribunal Supremo de Holanda, hasta 5.981 personas –una media de 16 al día- fueron “ayudadas a morir” por manos de sus médicos sin el consentimiento de los pacientes.
Y en estas cifras no se contemplan otros grupos que mueren involuntariamente: niños incapacitados, niños que con enfermedades terminales y enfermos mentales. Alrededor del 8 por ciento de los niños que mueren en Holanda lo hacen a manos de sus médicos, según un estudio publicado en The Lancet. Un ejemplo es el doctor Henk Prins, que mató, con el consentimiento de sus padres (pero sin el consentimiento del enfermo) a una niña de tres días de edad con esopina bífida y una herida abierta en la base de la columna. Este “médico” afirmó que nunca intentó tratar la herida ni curar a la niña, según el autor del libro Cultura de la muerte (Wesley J. Smith)
Son muchos los ancianos que en Holanda temen acudir a los hospitales. Incluso, un grupo de ancianos han elaborado unas “tarjetas de identidad” que siempre portan con ellos en las que se advierte que son contrarios a la eutanasia.
El Comité para Derechos Humanos ONU preocupado por la eutanasia en Holanda
Comentario del observador Vaticano ante Ginebra
GINEBRA, 29 julio 2001.- El Comité para los Derechos Humanos de la ONU expresó el viernes pasado «viva preocupación» por la ley holandesa que autoriza la eutanasia.
En particular, la institución de las Naciones Unidas considera que la aplicación de la ley conlleva el riesgo real de afrontar de manera superficial algo tan decisivo como la muerte de la persona humana.
Parcialmente despenalizada en 1994, a partir del 1 de enero del año 2002 la eutanasia será legal en Holanda, y no simplemente tolerada como hasta ahora.
El organismo de la ONU reconoce que se trata de una cuestión muy compleja, planteada en buena parte por la evolución de la medicina, pero al mismo tiempo confiesa que siente el deber de pronunciarse cuando un Estado «ofrece de manera deliberada protección jurídica a actos que acaban con la vida».
El arzobispo Diarmuid Martin, observador permanente de la Santa Sede ante la sede de las Naciones Unidas en Ginebra, ha explicado en declaraciones a los micrófonos de «Radio Vaticano» que el pronunciamiento de la Comisión es muy «importante», aunque reconoce que todavía debe ser analizado en profundidad.
«No sé si esta decisión y este comentario tocan la cuestión de fondo, es decir, si considera que la vida humana debe ser protegida hasta el momento de la muerte natural, o si simplemente afronta las condiciones planteadas por la legislación holandesa actual y pide más información».
De hecho, el comunicado insiste fundamentalmente en el riesgo que conlleva la ley de hacer de la eutanasia algo superficial.
Ahora bien, concluye, la declaración es «importante», «pues se da una gran presión sobre los demás Estados para que sigan el camino emprendido por los Países Bajos».
«Y, además –concluye el arzobispo Martin–, reafirma el hecho de que la protección de los derechos humanos es una preocupación de toda la comunidad internacional».