Reseñas de libros
La fábrica de betún
Novela que revive la infancia de Charles Dickens de una forma original y simpática. La acción, que transcurre en 1870, empieza con la aparición del espectro del escritor a su amigo John Forster, para mostrarle aspectos de su vida menos conocidos y ayudarle en la elaboración de su propia biografía.
El narrador, que es el propio Forster, adquiriendo las propiedades de fantasma, viaja junto con Dickens al pasado hasta 1812 para revivir la dura infancia de éste, deteniéndose especialmente en los más de dos años que trabajó en la fábrica de betún. Con estilo cuidado, salpicado de toques de humor, y en un escenario logrado del Londres victoriano de la época, el autor aproxima al lector, no sólo al obra de Dickens -de la que hay continuas referencias- sino también a su personalidad, a su ambiente familiar y a la situación social del momento, que si bien era de miseria para buena parte de la población, no se percibía pesimismo por la confianza en los últimos inventos, entre los que ocupa un lugar destacado el ferrocarril. Estos valores culturales, presentes en toda la obra, van envueltos en una historia amena y entrañable protagonizada por un espectro amable, que no inspira ningún temor, pero que sí aporta un cierto halo de misterio y fomenta la imaginación.
El libro se acompaña de una guía de actividades, pensadas para profundizar en la obra de este autor.