El Espíritu Santo asiste a la Iglesia

Como lo había prometido Jesús antes de marcharse de nuevo al cielo, desde allá nos envía, junto con su Padre, al Paráclito. 

Como lo había prometido Jesús antes de marcharse de nuevo al Cielo, desde allá nos envía, junto con su Padre, al Paráclito. Es san Lucas quien nos relata su venida: "Llegado el día de Pentecostés estaban todos reunidos en un lugar, cuando de repente sobrevino del cielo un ruido como de viento impetuoso, que llenó toda la casa. Y aparecieron unas como lenguas de fuego que se posaron sobre cada uno de ellos. Y todos fueron llenos del Espíritu Santo" (Hechos 2, 1-5).

 

El Espíritu Santo:

a) Iluminó el entendimiento de los Apóstoles en las verdades de la fe, y los transformó de ignorantes, en sabios.

 

b) Fortificó su voluntad, y de cobardes los transformó en valerosos defensores de la doctrina de Cristo, que todos sellaron con su sangre.

 

El Espíritu Santo no descendió sólo para los Apóstoles, sino para toda la Iglesia, a la cual enseña, defiende, gobierna y santifica.

 

Enseña, ilustrándola e impidiéndole que se equivoque- Por eso Cristo lo llamó "Espíritu de verdad" (Juan 16, 13).

La defiende, librándola de las asechanzas de sus enemigos.

La gobierna, inspirándole lo que debe obrar y decir.

La santifica con su gracia y sus virtudes.

Es muy significativo que los Apóstoles, en el primer Concilio, en Jerusalén, invocaron la autoridad del Espíritu Santo como fundamento de sus decisiones: "Nos ha parecido al Espíritu Santo y a nosotros. (Hechos 15, 28).

Ejemplos prácticos de esta asistencia del Espíritu Santo a la Iglesia hay muchos:

 

Ningún Pontífice Romano ha errado en sus decisiones dogmáticas.

Siempre se han desencadenado contra ella graves males, pero entonces suscita eminentes varones que los contrarresten.

Los perseguidores de la Iglesia nunca han podido hacer daños irreparables, y han tenido un fin desastroso

Nunca han faltado cristianos de eminente santidad.

Su acción en la Iglesia es permanente: "Yo rogaré al Padre y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros eternamente" (Juan 14, 16). Tal fue la promesa de Cristo. 

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4 comentarios

  1. alabado sea dios del cielo padre, hijo y espiritu santo, hermanos busquen a dios con el corazon ya que somos sus hijos y el nos creo por amor, caminemos en su presencia siendo agradables a sus ojos haciendo su voluntad y cual es su voluntad? obedecer los mandamientos y recibir a cristo en la sagrada eucaristia y el nos liberara de nuestras miserias que dios los bendiga

  2. cuando una persona le pide al espiritu santo con corazon limpio que venga a su vida este realiza cosas grandes debemos invitarlo a nuestra vida ya que donde esta el espiritu santo nada falta, pero para poderlo invitar a nuestra vida es necesario hacer un acto de contricion para tener el espiritu dispuesto a recibirlo ya que el es santo y quiere que lo recibamos con amor y que no lo contristemos ya que el mundo actual contiene muchos ruidos y distractores que nos apartan de dios busquen a dios con el corazon hermanos que el nos ama y no quiere que ninguno de nosotros se pierda. que dios los bendiga hermano(a)s

  3. la accion del Espiritu Santo en mi vida ha sido grande me ha liberado de mi alcoholismo, sano a mi hermano del coma de 3 dias, sano a una niñita de 2 años de coma cerebral, realmente el Espiritu santo es Dios mismo presente en la vida de la Santa Iglesia y debemos colaborar con El para lograr el fin ultimo de Dios en el mundo que es la salvacion de todo el genero humano saludos y que Dios los bendiga hermano(a)s

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